domingo, 16 de diciembre de 2007

castillo de arena


Aquí sentados, en el abismo del mundo, mirando el cielo morir una noche más. En la mano, las arenas del tiempo que se deslizan a gran velocidad, no dan tiempo de atrapar aunque sea un granito de la vida que se esfuma.

La vida cuesta, la muerte cuesta, todo lleva un precio, y lo que cuesta armarse, pronto puede disolverse como pequeños castillos de arena a las orillas del mar. Con el tiempo me di cuenta que los héroes y valientes, príncipes y princesas solo existen en los libros. El mundo real es distinto, la gente siente miedo, y los valientes no son los que avanzan frente a la adversidad a capa y espada montados en un blanco corcel sin sentir la menor inmutación. Valiente es aquel, que a pesar del miedo, intenta enfrentarlo diariamente. Valiente es el médico que salva vidas en un hospital público por el sueldo miseria de empleado público, valiente es el maestro de frontera, que a pesar de no tener lo necesario apuesta todo el tiempo para que puedan aprender algo en la vida, valiente es aquel que a pesar de estar rendido, cansado sin fuerzas y esperanzas continua levantándose de su cama día tras día para salir a la jungla de cemento.

No creo en hombres y mujeres todopoderosos, creo en personas comunes de carne y hueso, que lloran, ríen, aman y odian, que sufren y son débiles. Que a pesar de todo jamás pierden su capacidad de soñar, de crear, de proyectar. Tal vez seamos un poco equilibristas, y nos gusta pender de la cornisa. Atando los sueños a la realidad. Viviendo con la adrenalina única y esa vorágine que nos hace sentir vivos.

En lo personal, me gusta tener mi cabeza en la luna pero con los pies en la tierra. Conozco el piso que se despliega bajo mis talones. Por momentos es firme y conciso, y otras veces se torna inestable y movedizo. Pero es ahí cuando se que no estoy sola, y siempre existe una mano amiga para ayudarme a saltar el pantano. Para que caminemos juntos en la misma dirección, sin palabras, sin pantomima tan solo con la presencia infinita de saber que está allí al lado para socorrerme si lo necesito, para un abrazo sincero cuando siento miedo y una eterna sonrisa cuando este mal.

El tiempo corre, y cuanto más pensamos más se escapa, más se dilata la espera. Saltemos juntos entonces, no perdamos el tiempo y corramos tras la huella, tras el sueño que se escapa…no dejemos que el castillo de arena se disuelva entre la bruma, entre el mar y las estrellas.

jueves, 6 de diciembre de 2007

Una noche de verano...



Esa madrugada desperté empapadisima, enredada entre unas sabanas que no me eran familiares. Abrí primero un ojo, el izquierdo y a continuación el derecho, dando un giro de 180 grados hasta encontrarte allí tendido, con tu torso desnudo y un pie adentro y el otro fuera de la cama. Parecías un niño, allí dormido e indefenso. Las gotas de sudor caían por tu pecho, mientras que el aire del acondicionador hacia su máximo esfuerzo por intentar frenar la transpiración que brotaba, propia de una noche bastante agitada.

Me levante, me puse esa remera viejita tuya de Pink Floyd que tanto te gusta y me dirigí al baño para remojarme un poco la cara e intentar peinarme, el calor era sofocante, quizás también beber un poco de agua bien fría de la canilla; la cocina quedaba lejos, no había muchos ánimos de ir a servirme de la heladera.

Volví a la habitación, procuré no hacer mucho ruido, puesto a que me parecía una imagen muy tierna el verte allí tirado, tranquilo, con las defensas bajas, sin fuerzas para pelear, y me detuve a contemplarte por un buen rato. Busque en el bolsillo trasero de tu pantalón de jean color black denim un cigarrillo. Yo nunca fumo, pero esa noche se merecía uno, que se yo…a manera de festejo…pero, ¿Qué festejaba?

Me asomé al balcón y sentándome en el suelo al lado de un pótus medio marchito me prendí el pucho y comencé la cuenta regresiva de toda esa noche. Volviendo unas horas atrás en el tiempo, no sé ni cómo lo logre…una especie de efecto mariposa, me remonte al principio de todo, como llegue hasta esa habitación tan masculina, como hice las cosas que hice, el amor que sentí durante unas horas, en fin.

Todo comenzó la noche del viernes anterior en un bar de la calle Maipú. La cita era a las 21 hs, hacia tanto tiempo que no te veía que hasta ya tenía miedo de no reconocer tus facciones, tu pelo, tu olor, ese hoyuelo malvado que tanto me gusta junto a tu boca. En fin, todo me daba vueltas, el estomago era como una calesita a 180 km/h. mis manos sudaban y mis piernas se retorcían como una serpentina. Sentía ese miedo de adolescentes en su primera salida. Llegaste tarde, como es de costumbre en vos. Pero como enojarme si esa sonrisa siempre me compra. Nos miramos un instante, como reconociéndonos… ¿sos vos o no? Nuestros ojos se fundieron y solo atinamos a abrazarnos y besarnos, como pocas veces, pero parecía como la primera vez, con ese temor a lo desconocido.

Entramos al bar, nos sentamos en una mesita al fondo de todo. Las luces tenues hacían del lugar algo sumamente acogedor. De fondo algo de blues y jazz, Norah Jones era, creo. El me pregunta:
-Lo de siempre no?, o cambiaste en todo este tiempo???
Y yo le contesto:-si me conoces algo, sabes que yo no cambio tan fácil. Si, lo de siempre, afirmando con la cabeza.

Estaba maravilloso, tan varonil, tan maduro…tres años y parecía ayer cuando entre lágrimas nos despedíamos sin un reencuentro a futuro. Me pregunta tímido pero con ese aire canchero que lo caracteriza, ¿me extrañaste?...esbozando una leve sonrisa cómplice.
No le contesto,- dando un sorbo a mi daikiry de frutilla.- La verdad pensé, que te iba a extrañar más, pero no fue así.

Él:-Vamos nena, te conozco y no te creo-me toma de la mano.
¿Y vos?...¿le pregunto yo, pensaste en mi?
Él: Cada segundo de mi vida…y se ríe
Sos un fucking mentiroso!!!…seguro te encamaste con todas las yanquis que se te cruzaron por el camino. ¿Me vas a decir que en tres años nada?
Él: Linda, si me conoces bien sabes que estuve mucho pensando en vos. Y eso es posta!!
Yo:-Que pienses en mi no significa que seas un santo.
Ahí se acerca me toma del mentón, y me dice…extrañaba tus labios hermosos y esos cachetes rosaditos que contrastan con tu blanca piel. Me besa mordiéndome suavemente el labio inferior, con tanta dulzura, con tanta pasión, que creo que perdí la noción y el control de todos mis sentidos por 5 minutos.

Seguimos hablando un rato más, y en esa me dice:
- ¿queres ir al depto?….traje cosas nuevas, estuve remodelando un poco, además tengo algunas cosas que te traje.
Yo:-¿me trajiste algo?, ¿Qué?, pregunto intrigadísima.
Él. Ahhhh!!!..surprise linda, ya lo sabras.

Paga la cuenta, como siempre. Y nos vamos doblando la esquina. Ahí estaba estacionado su auto. Un palio nuevo muy bonito, con vidrios polarizados de color negro. Muy discreto todo. Subimos y vamos para su casa. Cuantos recuerdos…cuantas tardes y noches a escondidas, cuantos secretos, encuentros y desencuentros.

Llegamos rápido, no había mucha gente circulando…raro para ser una calurosa noche de sábado. Guardamos el coche en el garaje, y luego subimos. Ese lugar era tan mío y a la vez no. Había olor a historias mías por todo el edificio, pero sentía que una parte mía se había olvidado de todo eso.
7mo piso, depto. C. él entra primero, prende las luces. Estaba todo muy cambiado. Muy minimal. Blancas paredes, vidrio, metal, sillones negros. Muy distinto a la última vez que pase mi noche en ese lugar. Ya no reconocía nada. Todo me era ajeno.

Hacía mucho calor, prende el aire y me da algo de tomar de la heladera. Yo prendo la radio, Aspen. Justo un tema que amamos, Crazy de Patsy Cline. El se sienta a mi lado sin quitarme la vista. Y de apoco su boca comienza a acercarse lentamente sobre el margen derecho de mi cuello. Me corre hacia un costado el cabello, y comienza con suaves besos a recorrer mi hombro, mi cuello hasta llegar a mis orejas. Dejo el vaso a un costado, y comienzo a besarlo también con suma pasión, como anhelando esos besos, esas caricias que por fin eran mías otra vez. En un acto de impulsividad, se levanta del sillón y me sube sobre su regazo llevándome hasta el dormitorio. Me desliza suavemente sobre la superficie de la cama y su cuerpo se tumba con suma cautela sobre el mío. Me sigue acariciando, sus manos necesitaban reconocer el terreno que estaban tocando, volviendo a recorrer los senderos que habían sido olvidados durante tres años de larga ausencia. Yo lo necesitaba, lo aclamaba. Me arrodille sobre el colchón y de apoco fui desabrochando los botones metálicos de su camisa negra. De un tumbo lo deje del otro lado de la cama. Yo sobre su regazo…comencé a desprenderme de mis ropas con un poco de vergüenza y ese jueguito de nenita que tanto lo volvía loco.

Lo tome por las manos y llevándolas hacia la cabecera de la cama lo sostuve con todas mis fuerzas, acepto que el también colaboro un poco. Nos poseímos el uno al otro. Ya ninguno de los dos sabía cual eran los límites del propio cuerpo. Rasgue su pecho con mis uñas y saboree de su ser como nadie más hizo. Fuiste animal y dulce, y yo me convertí en tu vampira, bebí de tu sangre, de tu esencia. Me hiciste gritar hasta que las paredes vibraron, 4 o 5 veces. De repente todo se calmo y moriste en mí, y yo morí en vos. Perdí el conocimiento…así hasta casi el amanecer. Luego dormiste y yo dormí en tus brazos.

Así estuve hasta que desperté y volví en sí. Ahora te miro, tan niño tan hombre, tan mío…ansiaba tus besos, tu sexo, tu cuerpo. Las noches clandestinas, todo tu yo. Tire la colilla del cigarrillo por el balcón y volví a tu lado. Ya no quería perder ni un minuto más de ti, tres años de eterna espera habían sido demasiado…ahora por fin estabas aquí, entre las paredes de la habitación donde me hiciste tuya por primera vez.

domingo, 2 de diciembre de 2007

bitacora de una obsesion


Mío, tan solo quiero que seas mío. Te nombro, te busco, más no te encuentro. Te pierdes en mi mente, en mi cabeza conjunto a los millones de recuerdos e imágenes mentales de tu rostro. Te vuelves añicos, te desgranas con el ocaso, y yo con esa paciencia infinita intento unir tus moléculas para volverte a transformar, recrearte a mi modo de alguna manera. Pienso en ser dios y hacer de ti mi creación. Quizás pueda configurarte, transfigurarte…reprogramar tu corazón y tus recuerdos.

Te observo a cada instante, como a una joya entre mis manos, y me carcomo a mí misma, en mi recelo y en mi soledad. Te lloro en silencio, y trago mis lagrimas cuan veneno, que cae por mi garganta como un acido, que llega a mi estomago plagándome de bilis verde, que brota por mis poros con ímpetu, con esa ira que tan solo conocen los que sufren al perder.
Camino las calles añejas, olvidadas por el tiempo y a la buena de Dios, buscando un sendero que me lleve tras tus huellas. Sé que es tarde, tu reloj ya dio las horas, y él no sonara por mí ya nunca más, pero aun intento una vez más recobrar lo que alguna vez fue mío, y que con tanto fervor cuide y ame.

Me volví polvo, la sombra de una niña que de repente se hizo mujer en tus brazos. El espectro de un ser oscuro. De uñas negras y cabello ensortijado. Un ente que vaga por los rincones del mundo buscando un aroma, un sonido, un signo o una señal. Algo que tenga tu forma o parte de tu esencia. Unos ojos que me miren y no me juzguen. Te ame demasiado, pero jamás me había dado cuenta hasta que un día abrí los ojos y ya no estabas al pie de mi cama como todas las mañanas, que tus manos ya no se enroscaban entre mis cabellos, y tu boca dejo de respirar sobre mi nuca.

Me siento más sola que nunca, vacía y desamparada, acurrucada en un rincón esperando. Empapada en un mar de llanto. Lastimando mi piel, vejando mis manos y mi corazón. Quiero desconectar mi cuerpo del hilo que me une al mundo y dejarme llevar. Ya no me importa el destino, el cielo o el infierno me da igual, de todas maneras en ninguno de los dos estaré contigo. Fracase, contigo y conmigo. Ya no deseo más nada, pues todo lo que deseaba era al menos una noche entre tus brazos, pero esa idea se ha esfumado.

Vuelvo a mirar los recortes de tu rostro en la vieja fotografía color sepia, esa que destruí y luego intente rearmar tal cual un rompe cabezas con cinta. Ya nada es igual, o todo es lo mismo. No se…no encuentro diferencias. Las noches de alcohol y música suicida quizás crearon un ser anestesiado, incapaz de inmutarse ante cualquier acto sublime, con la virtud de escaparse propia de los cobardes y la esperanza de los que sueñan, propia de los valientes. Ya no creo en nada, ya no creo en nadie, ni siquiera en mi misma, porque hasta yo he traicionado mi dignidad, rebajándome a la suplica, humillándome ante la indiferencia. Comiendo de las migajas de tu corazón partido. No es mucho, pero así me conformaba. Pero ahora sé que no es lo que mi cuerpo necesita. Mi alma te aclama entero, no porciones de ti.

Estoy cayendo, sucumbo ante lo inevitable, era previsible todo esto pero estuve ciega y me negué a ver la realidad. Me encerré en mi castillo de cristal y no quise saber del mundo real. Hoy que me volví una vagabunda, mendiga de un sentimiento, dueña de una obsesión se cuan errada estuve. Ahora pago mi pecado, amarte con locura, tanto así que resolví volar lejos. No tiene sentido la vida, y la muerte me parece absurda. Quizás, en otra vida, en otro cuerpo en otro tiempo y lugar, pueda reparar mi error…por eso allí voy a tu encuentro…



Y la sangre se extendió a lo largo y ancho de la sábana blanca de algodón. Este es el fin de una agonía, el final de una obsesión.


lunes, 26 de noviembre de 2007

Una serie de eventos mas que desafortunados!!!


No fue martes ni viernes 13, pero rayos que si fue un día de miércoles! Ya no recuerdo de que semana estoy hablando, porque intento resetear los malos momentos, para que solo pasen a formar parte de la papelera de reciclaje. Aunque este merece ser recordado, como el día de mas mala suerte de toda mi vida, hasta hoy.

Todo empezó el día anterior. Eran las 18 hs de un día tal, mientras estaba tomando la chocolatada con galletitas melva, suena el teléfono. Corrí a atender porque luego de los cuatro llamados atiende el insoportable contestador, y luego me da mucha fiaca levantar los mensajes. Además, odio cuando creo que hay mensajes, y solo respiran y cuelgan. Por Dios! ¿Les avergüenza una maquina contestadora???, bueno no viene al caso. Atiendo:

Yo:-Hola?
Srta. del teléfono:-Si con la Srta. M, por favor?
Yo:-Si, es ella…Quien le habla?
Srta. del teléfono:-hola la llamo para concertar una entrevista para el día de mañana por un puesto de empleada, en el local de Jazmín Chebar
(ahí casi que me atraganto con la galletita)
Yo:-Si como no…dígame a qué hora y donde!

La muchacha me pasa todos los datos, cuelgo el teléfono y me mando una de esas puteadas berrinchosas…Fucking hell!!!...se me acabó la haraganería!
El día terminó, me fui a dormir temprano porque sabía que me tenía que levantar para los preparativos, y como buena mujer que soy siempre tardo.

Al otro día, me levante como una tromba porque me había quedado dormida, el despertador que compre en el todo por dos pesos obviamente debería venir con fecha de caducidad porque no sonó. Menos mal, que tengo un reloj biológico que funciona bastante bien. Me vestí, me calcé los zapatos, agarre mi bolso y partí.
Ya de por sí, el viaje fue pésimo. Viajando como ganado desde la estación Ballester hasta Carranza. El olor a pueblo que se metía por mis fosas nasales me estaba asfixiando y no me dejaba respirar. En cualquier momento sacaba la cabeza por la ventanilla y devolvía ahí mismo. Al tiempo, que los trabajadores y colegiales libidinosos bajo el marco del apretujamiento aprovechaban a apoyarte de todos los güines habidos y por haber. Así llegue hasta Carranza, viajando en una lata de sardinas durante 30 minutos. Salgo de la estación, y camino hasta Libertador, cruzo por la gran casa de corridas y espero el 34 con destino a Plaza Italia.

Me bajo en Santa fe, y con la puta mala suerte que solo tienen los tremendos losers, al descender del bondi se me quiebra el taco del stilleto. ¡¡¡Maldita sea!!!, mi mala suerte no podía ser peor, por poco y no me quiebro el pie. Me acorde tan bien de toda la familia del colectivero por estacionar a 50m de la acera que me habrán escuchado hasta en el zoológico.

¿¿Qué hago?? Fue lo primero que dije mientras miraba el taco de mi zapato con esa cara de Perrito mojado. Comprar unos zapatos nuevos era imposible, 1 porque ya no había tiempo y dos no tenía suficiente dineral. Por suerte de esas previsiones mías, cada vez que salgo con zapatos llevo en mi bolso mi par de zapatillas porque sé que no los soportare por mucho tiempo. Y dije, ¡¡bueno ma’ si!!, al menos están iguales. Me calce mis converse, y Salí cagando para la entrevista. Creo que mi maratónica corrida por Borges, nunca había sido tan rápida. Di un par de vueltas buscando al mal parido local hasta que al fin lo encontré. Me tomo unos 10 minutos para respirar, arreglarme un poco el pelo, y echarme algo de perfume.

Abro la puerta, y pongo mi mejor sonrisa esbozando un buen día muy afable, y me dirigí al mostrador. Allí había una chica con mucha cara de aburrida, le explique quien era y para que venía, y con cara de pocos amigos…me dice:-espera ahí!!! A bueno dije yo para mis adentros, si así empezamos. Ya no tenía un buen día, me salía con alguna boludes y se armaba el soho. Espero 5 minutos, y luego sale la misma Srta. y me hace pasar para hablar con la encargada de personal.

¡¡Jamás me imagine un persona con tanta mala onda!!, por favor!!...El aire se cortaba con una tijera. Entre mi dije, ¡ni loca quiero trabajar acá!, así que más vale que esto se termine rápido porque me quiero ir a mi casa. Como a los 20 minutos ya estoy en la calle otra vez. Entro a caminar con rumbo para Santa Fe otra vez por Godoy Cruz. Eran las 11 de la matina de un día muy caluroso, ya estaba pensando en llegar a mi hogar, llevar los zapatos a arreglar, cuando en una de esas vueltas macabras del destino, un tipo sale de la nada de una esquina. Un negro, un cabeza…que me apunta y muy apresurado me dice,¡¡¡dame toda lo que tenés !!!, rápido!!..Yo me quede dura…era la primera vez en mi vida que me afanaban. Me dice, que sos sorda piba!!??...No, dije yo. Toma pero no me hagas nada!!, agarra mi bolso, y me dice date la vuelta, zas, pensé yo acá me lleva a un descampado y me viola. Date la vuelta y seguí para allá, y más vale que no digas nada a ningún rati…porque tengo todas tus cosas y cagaste chetita!!, (¿cheta yo?, puff pensé). Entre a caminar en sentido contrario, cagada hasta las patas. Así hice dos cuadras, mire para atrás y ahí me dije…la puta madre!!!...Ahora…¿Qué hago?, no tenia guita para volverme, todo estaba en mi bolso. Billetera, documentos, llaves…¡mis zapatos! Ni siquiera podía llamar a mi casa, porque a esa hora no hay nadie.

Me senté en el escalón de un depto., y lo único que alcance a hacer fue largarme a llorar como una idiota impotente. ¡Menos mal!, al menos mis lagrimas sirvieron de algo. Una Sra. que pasaba por ahí escuchó mi llanto desconsolado, y me pregunta que me había pasado, porque lloraba así. Yo entre llanto, moco tendido y la falta de respiración (aclaro porque cuando lloro desconsoladamente no puedo respirar), le explico que me acababan de robar todo, y no tenia como volverme a mi casa. La Sra., muy gentilmente saca de su billetera $5 pesos y me los da. Yo muy agradecida, le pido su teléfono para así devolvérselo más tarde, y ella se niega rotundamente, me dijo por 5 pesos no te vas a venir hasta acá otra vez. Le agradecí eternamente y emprendí rumbo a mi casa.

Otra vez bancarme el tren, más vacio ahora y luego un colectivo. Por fin estaba en mi barrio, ahora a casa me dije, no salgo más en todo el día!!!...y para mi grata desgracia, chan!!...no había en casa nadie, y yo sin poder entrar. Muriéndome de hambre, de sed, de calor, con una mala onda impresionante, espere desde las 13 hs hasta las 15hs en el escalón de la puerta de mi casa.
Al fin logro entrar…solo quiero irme a dormir y no salir más!!...En eso suena el teléfono, y para mi grata sorpresa, mi hno. atiende y me dice, te llaman de un local…quieren saber si podes empezar mañana??...Nooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooooo!!!.

miércoles, 21 de noviembre de 2007

2+2=5


Cerdos que comen de tu mano, y danzan en lujuria, te llaman a la fornicación, y finges…simulas, un mundo irreal, que descansa sobre tus hombros… te va venciendo en la penumbra.

Eres un maldito soñador, que vive de ilusiones. ¿Cómo puedes ver con cuando tus ojos están sellados? La madre perra te poseerá sino aprendes a discriminar. El saber distinguir entre el bien y el mal, motivo de ángeles caídos y batallas celestiales.

Por algunos momentos, te caes al piso y ruedas y ellos dejan que te fundas…en tu propio excremento y hedor, que comas de sus palabras como un veneno enriquecedor, y que te vuelvas un pasivo en este juego de roles.

El cielo se cae, y aun en su pedestal, tu corona de vanidades se desgrana bajo el sol. Un día nuevo que sale, y los gusanos aguardando por devorar tu corazón. En el polvo comerás, enviciado y asqueado por el vomito y el pánico. El dolor te embeberá, y por tus venas correrá el vacío existencial y la amnesia de identidad.

Calla, solo sabes callar. Los buitres negros se servirán de tu carne carente de afecto. ¿Cuándo fue que ha ocurrido esta fuga masiva de cerebros?, con las manos llenas de lodo entre el llanto y la sangre, la justicia se desdoblará en la feria de las debilidades.

Tan sólo divagaras en un mundo sureal, con pautas y normas que rijan tu verdad, en tu consiente ambigüedad, tu palabra ha sido denegada. No cuestiones mi autoridad. Sera que no has estado prestando atención.

Si pretendes cambiar tu mundo con leyes sometidas, entonces prefiero quedarme aquí, en mi hogar… donde 2 + 2, siempre será igual a 5.

Nota al pie: Libre interpretación y readaptación de la canción. Ver también original 2+2=5 de Radiohead. Para otros puntos de vista que acompañen la idea también ver, The Wall y Rebelión en la Granja.

domingo, 18 de noviembre de 2007

Verde oscuridad


Vivo en la oscuridad, pero en una oscuridad afable. Una oscuridad que descansa detrás de los ojos como un sueño profundo. Esa verde oscuridad que deambula lenta y misteriosa por los rincones del inconsciente. Que se extiende como un enorme lienzo donde proyectare mis miedos, mis aciertos, mis momentos de placer onírico y mis pesadillas mas ocultas.

Extiendo en un trance mi mano al infinito intentando acariciar cada estrella que pasa fugaz y estrepitosa por mi cabeza. Pinto el cielo de color, y floto entre los humos de verde jade que arden con fusión. Así la oscuridad se va transformando, y haces de luz comienzan a filtrase con una violencia sensual. Todo se ha teñido, ya la nada era el todo. Visiones y espejismos multicolor, resplandecientes, como la imagen de un Dalí vivo se desplegaban como abanicos. Mascaras danzantes, aquellas salidas de los clásicos carnavales venecianos, todo era una fiesta, espesa y efervescente, una clase de nirvana ultrasensorial.

Extasiada bajo ese placer de imágenes, comienzo a ser parte de tan preciado y deslumbrante escenario. Unicornios alados acompañan mi ascenso al desconcierto y la fascinación. Lunas rosas giran a mí alrededor, adornadas entre rosas y envueltas en un manto de estrellas y perlas. Soy por fin parte de un sistema, pertenezco. Las imágenes son el legado de mis deseos. Todo es mío, absolutamente mio.

martes, 13 de noviembre de 2007

Un break


Desespero, caigo y tiemblo. La acidez me quema el vientre, y la incertidumbre mi cabeza, que se enreda entre telarañas, las que tejen y destejen mis pensamientos noche tras noche. Me levanto, titubeo, parpadeo un par de veces antes de abrir los ojos completamente.

El frio me ataca, la desolación y la agonía se filtran como las gotas de lluvia que caen suspendidas, lentas, como sabiendo que terminaran rompiéndose en el suelo, como mi fe. Desfilo por el corredor, ruedo por una escalera y entre espejos rotos intento figurar mi rostro, rearmar ese imaginario sobre mí, que hace tanto extravié, que hace tanto olvide. Camino por el callejón, me pierdo entre las paredes, me desdibujo. Quiero arrancar el ancla que me ata al mundo, quiero volar, huir allá lejos, a un lugar que solo vi en los sueños.

Trepo un paredón repleto de grafitis, salto la valla y corro. Rompo las barreras del espacio, del tiempo, de la sociedad y me pierdo, me escondo, me disfrazo de todo aquello que quieres que sea y que no. Me olvido de todo, hago un back up a mi mente y comienzo otra vez. Te vuelvo a buscar, y en círculos me vuelvo a enredar.

Busco en la espera que desespera, una mano conocida o no, unos ojos que dejen de mirar para poder ver. Lo que yace más allá, lo que las retinas vulgares no pueden divisar, un alma que se evapora, un alma que se dilata en la luz. Abro mi corazón ante ti, y dejo escapar un millón de mariposas que se mimetizan, que pronto se secaran y volverán a ser polvo y materia otra vez, regenerándose en algo nuevo, mutando.

Desvanezco, mis piernas tiemblan y mis labios se vuelven áridos, deje de respirar por un instante para sentir el respiro de un ángel. Me buscaste y me sostuviste con tus palmas, me cobijaste y me diste calor como a un pequeño gorrión. Curaste mis alas rotas, peinaste mis cabellos finos y besaste mis ojos para que ya dejara la mediocridad en el pasado. Pusiste una diadema de estrellas sobre mi cabeza y vestiste mi cuerpo desnudo y pálido. Me amaste, sentí amor, pero mas allá del físico, vi tus ojos apacibles que me idolatraban y sentí el amor brotar de tus pupilas. Me sentí especial. Deje de correr, ya no quise escapar, al fin mis pies habían encontrado un hogar, al fin mi alma se sentía en paz.

sábado, 10 de noviembre de 2007

De una veinteañera despechada!!


¡¡¡Te odio, te odio, te odio!!!...fueron las últimas tres palabras que pronuncie mientras tiraba toda tu basura por la ventana del departamento. ¡Cómo hubiese deseado que un colectivo te pasara por encima a vos y a tus cosas en ese momento, pero no!...Y sí, soy buena pero no buenuda, mi paciencia tiene un límite, y vos colmaste mi vaso.
La verdad no sé cuando las cosas comenzaron a ponerse en estado de cangrejo, cuándo fue que retrocedimos tanto al punto de convertirnos en dos extraños. Pero la cosa ya llego a su extremo máximo, y no puedes tirar mas de esta cuerda…ya se ha roto.
Tu cumpleaños número 30 fue el epicentro de la decadencia, no solo de nuestra relación, sino de tu vida, y más que nada de tu persona. ¡Maldito numero!, entraste en una crisis existencial, bueno no me extraña mucho…desde que te conocí toda tu vida era una crisis. Carente de personalidad, vacio de anhelos y sueños. ¡Convivir contigo era lo más parecido al Armagedón que a la vie en rose!, tan solo con el hecho de nombrarte la palabra convivencia, se te helaban los miembros. Estoy cansada de luchar contra la corriente. Es imposible que una persona no tenga ambiciones en la vida, pero lo imposible se hizo verdad en tu persona. 30 años y aun vives muy cómodamente con tus viejos, te quejas del trabajo de mierda en el que estas, pero sin embargo no quieres cambiar por miedo a no conseguir, el compromiso te da pánico, ni hablarte de hijos o de casamiento en algún futuro muy, pero muy lejano.
¡Quédate tranquilo, que a vos ahora no te busco ni para tomar un café!
Me da mucha bronca, porque yo tengo ambiciones, quizás simples pero las tengo, y al lado de una ameba como tú, toda mi vida estaba truncada. ¿Qué podía proyectar?...absolutamente nada.
La gota que rebalsó el vaso fue cuando ya ni siquiera me querías tocar. La caída de pelo trajo también la caída de otras cosas. 6 meses sin nada, remándola como mejor pude. Hice hasta las peores y mas asquerosas cosas que en mi vida hubiera hecho por lograr reactivar tu sexo, ¡pero nada!, soy una terrible boluda!!!Por un momento llegue a pensar que quizás la que no te calentaba era yo, y hasta te propuse que intentaras con otra persona, para ver si así tu “amigo” reaccionaba; pero me dijiste que no, que me amabas, que no necesitabas de otra… pero yo no te excitaba y eso ya era evidente. Había momentos en que por las noches mientras dormías, te dabas vuelta y comenzabas a tocarme, yo animada por eso me subía a tu regazo y comenzábamos a tener relaciones, hasta percatarme que estabas dormido. Te abofetee, y despertaste…y enseguida hiciste un gesto como ¿de qué estás haciendo?..Me corriste, te diste vuelta y seguiste durmiendo. Pedazo de idiota!!...¿no te das cuenta que todo está en tu mente? Quise ayudarte, te dije…si es necesario vamos a un psicólogo, sexólogo, psiquiatra lo que haga falta…pero, ¡dejáte ayudar, porque esto se va al diablo! Fuiste dos sesiones y dejaste porque dijiste:-“la idea sola de contarle mis cosas a un extraño no me gusta”. -:¡Ah, bueno!...ándate al re carajo!!!, dije.
Me harte de tus pendejadas, me considero demasiada mujer para seguir perdiendo el tiempo, soy joven, ¿porqué truncar mi vida y mi juventud al lado de alguien que no sabe ni donde está parado? Porque algo de amor propio guardo, es que decidí dejarte…, no mas llantos, me agobian tus mariconadas, si ya sé que no vas a cambiar. Si tus lagrimitas de perro arrepentido me vuelven a comprar se que todo seguirá girando en el mismo lugar…por eso adiós, por eso te dejo…no quiero sufrir, no vale la pena, no vales la pena…¡ya no más!
Nota de página: Gracias Amiga Jay por prestarme tu historia y dejar que la hiciera relato…al fin amiga, tomaste valor…never, ever again!!

miércoles, 7 de noviembre de 2007

Pedido de una androide paranoica


¡Desnúdame!, despójame de todo lo conocido, de todo lo olvidado…apártame de toda significación y hazme pura, has de mi un nuevo ser. Ya estoy corrupta, necesito que limpies mi mente para si volver a foja cero.

¡Tócame!, hazme sentir viva por tan solo un instante, átame a tu pecho y enciérrame en tu mente para nunca escapar de tu recuerdo, de tu imaginación. Quiero ser yo quien viva en tu fantasía, quiero ser yo la musa de tus sueños y de tus pesadillas. No quiero que otro ser vague por tus adentros, déjame recorrerte entero, abrir tu pecho en dos y devorar tu corazón, comer de tu carne, servirme de tu sangre, de tu esencia.

¡Recuérdame!...quiero ser la imagen viva que reflejen tus ojos apagados que el recuerdo te duela y te haga sentir como dagas en tu alma, como agujas en tu cabeza. Quiero ser el latido de tu corazón, el jadeo de tu voz, tu eterno deseo inconcluso.

¡Deséame!, necesito que me aclames, que me llores, que me grites…Que todo tu cuerpo se convulsione. Que cada una de tus células reclamen por mí. Necesito sentirte sobre mí, tocarte y que mis dedos tiemblen, que mis rodillas flaqueen, que mi voz se vuelva un susurro al pronunciar tu nombre. Que me vuelvas sublime, que escalemos al espacio con tan solo cerrar los ojos.

No deseo ya mas vagar por este mundo sin ti, el tren de la melancolía no me lleva a ninguna parte, solo me arrastra y me aparta de mí realidad, de mi absurda realidad. Quiero romper con la burbuja que nos separa, que nos hace invisibles. Necesito ser humana, sentir, llorar, amar. No más androide, no más paranoia. No más divagues, ni actos ilusorios. Necesito de lo real, lo tangible, lo que con mis manos pueda tocar, armar y deshacer. No deseo ser un espectro que solo merodee en tu oscuridad, dame luz, dame luna, dame estrellas, dame noches eternas.
Ya estoy cansada, necesito reposar, reposar en tu hombro. No más noches en vela, no más noches de pena…no quiero seguir nombrando tu nombre en el espejo con la esperanza de que aparezcas. Te necesito real, más real que nunca. No mas sueños, solo realidad.


domingo, 4 de noviembre de 2007

Soy re kitsch…y qué?


Mira bien a tu alrededor, observa que de seguro tenés uno repleto de polvo en el estante de tu living…si ahí, justo al lado de la porcelana de la abuela. Sí, mi estimado, mi estimada…la vida posmoderna es completamente una imagen kitsch, como salida de uno de los aparadores de los negocios de todo por $2. Y es que precisamente, nuestra generación tuvo que convivir forzosamente con ese tipo de comercializaciones. Si de seguro llevaríamos una etiqueta colgada en la espalda, diríamos sin mas vueltas made in china. Somos una sociedad vulgar, una mezcla de glam con grasa, amantes de lo grotesco y esas baratijas que no sirven para nada, caquidornos como les suelo decir.
Ese absurdo deseo de aparentar ser, de tener y no tener, porque a la vez son burdas imitaciones, y de muy bajo costo por supuesto. Desde el punto de vista de los estudiosos, la estética del kitsch se basa en una falsa consciencia, un término marxista que significa una actitud mental presente dentro de las estructuras del capitalismo que está equivocada en cuanto a sus propios deseos y necesidades. Los marxistas suponen que entonces existe una separación entre la situación verdadera y su fenomenología.
Pero kitsch no se refiere solamente a esos adornos carentes de funcionalidad y de una belleza no estereotipada. También existen personas, imágenes y cualquier otra situación que nos llame al desconcierto, por que el kitsch también es eso, la controversia, el shocking, ese espanto que nos resulta grotesco, mórbido pero absolutamente atractivo. ¿Me gusta pero no sé por qué? Sin ir más lejos, no sé si alguien recordará la película “La Naranja Mecánica”. Bueno, para los que la hayan visto, ¿recuerdan el cuadro situado sobre la cabecera de la cama del protagonista?, un cuadro que exhibía sin más pudores una mujer abierta de piernas, desnuda y que le brotaba una planta de su zona genital. Bueno, dicho cuadro lo he visto el otro día en la casa de mi amiga, cuando fui para hacer un tp para la facultad. Una casa muy bonita, espacios amplios, muy minimalista. Mucho blanco, madera, vidrio y metal. Espacios carentes de muchos objetos. Al entrar a ese living despojado, mi ojo no pudo evitar sentir dicho rechazo contra esa pintura, que dentro del marco de la película resultaba hasta sensual, pero dicha descontextualización hacia perder la obra y solo causar repulsión.
Aquí les dejo unas claves acerca de cómo reconocer cuando estamos ante la presencia de ojetos kitsch:
Un objeto kitsch debe de ser barato. Pagar más de tres euros supone un robo a no ser que el objeto alcance el grado de lo sublime. Recuerde que casi siempre se puede regatear el precio.
Los objetos kitsch están fabricados en plástico y decorados con colores brillantes y/o purpurina. Pese a ello se aceptan añadidos de cristal, metal, textil o metacrilato siempre que ayuden a engrandecer el objeto en cuestión.
Pese a estar realizado con materiales de tercera categoría, la suma de aleaciones produce un resultado final prácticamente indestructible y con una acusada tendencia a acumular polvo.
Generalmente en su base encontraremos grabada o pegada la inscripción 'Made in China', independientemente del lugar donde haya sido adquirido.
Un mismo objeto kitsch puede servir de 'Recuerdo de'... Valladolid, del Tirol o de Grecia, no importa. La diferencia estará únicamente en la pegatina que indique su procedencia.
Los objetos kitsch tienden de forma natural a reagruparse en sitios insospechados, creando así una fauna propia y endémica del hábitat ocupado.
Finalmente, concluyo diciendo que no se debe confundir kitsch como sinónimo de horrible. El kitsch supera esa definición elevando a los altares todo aquello que nos duele a la vista, que nos hiere el criterio estético, sea el que sea. Un objeto kitsch es tan horroroso que nos agrada, tiene un poder sensual y sexual, nos atrae irremediablemente y una vez te atrapa la estética kitsch estás perdido.

viernes, 2 de noviembre de 2007

Dadaismo by Kawakubo by me


Bueno, lo siguiente aqui sinceramente no le vas a interezar a nadie por el simple hecho de que se trata de mi vision de una vanguardia artistica que admiro muchisimo que es el dadaismo desde la perspectiva de alguien que para mi es un hito dentro del fashion world...aunque ella dista mucho de considerarse como tal.
Este es dicho tema que he de presentar hoy viernes 2 de noviembre para mi ultima clase de historia del arte, resumidamente aqui obvio.

Es importante destacar que los diseñadores por lo general obtienen muchas de sus inspiraciones o conceptos creativos dentro de la rama del arte. Es asi tambien el caso de la diseñadora Rei Kawakubo.
Si bien su conceptualizacion, su idea visionaria y creadora se podria transpolar a los conceptos utilizados por distintas vanguardias ya sea constructivismo, futurismo,minimalismo, etc. En este caso nos baseremos en su relacion al movimiento dadaista.
Kawakubo sienta sus bases y creencias de diseño en muchos de los conceptos utilizados por los artistas dadaistas. Una de sus principales similitudes es la idea de destruir todos los códigos y sistemas establecidos en el mundo del arte, en este caso ella lo toma desde la moda. La diseñadora japonesa ha utilizado sus colecciones para destruir los códigos sexistas a través del uso del color y las formas. Kawakubo acepta el sistema de la moda, lo entiende pero lucha contra él. No le gusta el gran sistema. No participa en esa industria que compra gente, diseñadores y luego los vende. Donde el dinero tiene todo el poder. En lo que respecta al pequeño sistema, a las rutinas, puede aceptar sus necesidades: por ejemplo, hacer dos desfiles al año en la semana de la moda. Pero no, en lo que respecta al grande, al que lava cerebros y pretende inculcar lo que es bueno y lo que es malo.

Ya en los manifiestos dadaistas se dejaba en claro que dichas obras se perfilaban como un movimiento antiartístico, antiliterario y antipoético, que se cuestiona la existencia del arte, la literatura y la poesía. Se presenta como una ideología total, como una forma de vivir y como un rechazo absoluto de toda tradición o esquema anterior. Este concepto también es tomado por la diseñadora que se caracteriza por tener un estilo descontracturado, cercano a la antimoda. Kawakubo ha puesto en tela de juicio los esquemas tradicionales de la forma del cuerpo y ha criticado el concepto de glamour impuesto por la sociedad occidental.

Ambos proponen en sus creaciones esa eterna contraposición a lo estipulado, a lo fijado arbitrariamente sobre la belleza de las cosas. Están en contra a la eternidad de los principios, de las leyes de la lógica, de la inmovilidad del pensamiento y de lo universal. Los dadaístas promueven un cambio, la libertad del individuo, la espontaneidad, lo inmediato, lo aleatorio, la contradicción, defienden el caos frente al orden y la imperfección frente a la perfección, al igual que ella que en sus obras ha intentado plasmar la belleza de lo imperfecto para hacer singular y única cada creación.
En propias palabras de la diseñadora:"Muchas veces me han dicho que cuando la gente lleva mi ropa se siente poderosa y libre. No es esa mi intención ni mi objetivo cuando comienzo a diseñar una colección, pero es el resultado natural de luchar tanto en su creación. Eso implica, por tanto, un esfuerzo para llevarla. Y si la gente lo consigue, obtendrá una recompensa al final, se sentirá más fuerte.”

Al igual que los artistas dadá, Rei Kawakubo sobresale en la escena de la moda por su clara definicion de anti-moda, amante del shock, del escándalo, de la provocación, con la ayuda de medios de expresión irónico-satíricos. Basandose en lo absurdo y en lo carente de valor e introduciendo el caos en sus escenas, rompiendo las formas estilísticas tradicionales, es así como crea una figura tanto femenina como masculina carente de toda concepción tradicional.
El hombre aparece vestido en multitud de colores que le hacen volver al universo infantil donde no se hacían distinciones entre feminidad y masculinidad.
La mujer viste zapatos de traje, planos, muy masculinos sin perder por ello su esencia femenina. Incluso ha vestido a mujeres con jorobas o ha roto piezas de sus prendas como los cuellos o las mangas.

Eso en cuanto a sus semejanzas ideológicas y conceptuales. Ahora en tanto a sus similitudes dentro de lo que es el marco artístico, Kawakubo utiliza una técnica muy semejante a la de los artistas dadaístas. Como si las telas fueran un gran collage, Kawakubo utiliza a menudo la superposición de géneros y materiales combinados muchas veces con distintas técnicas de acabados u otros materiales no convencionales, que hacen de las prendas algo más, casi situandolas dentro de lo que seria una obra de arte.

Cada fragmento tiene un valor formal, y un valor de contenido propio, y ese collage propuesto en sus obras se transforma en un dinámico y absurdo juego de imágenes fragmentadas que revelan metáforas inesperadas, algo mas alla de lo pragmático y visual.

Rei Kawakubo, visionaria, autentica creadora no solo de un estilo de vestir, de una imagen...conlleva en ella toda una autentica filosofía de vida que la plasma en cada objeto que toca. Su alto conceptualismo aplicado a cada una de sus obras, nos habla de su persona mas alla de los parametros del diseño, sino mas bien concebida como una artista.

Por Dios cuando cresca quiero ser como vos!!!!!!!...soñar es gratis..cuando caiga Montoya tambien a cobrarme los sueños entonces pasare al plano real...

martes, 30 de octubre de 2007

Extraños conocidos!!


Una gota de sudor frio rueda por tu espalda. Una lágrima de sal cae por mi ojo. Un hombre, una mujer. Dos extraños conocidos, danzando al compás de una vieja canción. El tiempo se detuvo, ya no sabíamos ni de amor, ni odio. No hablábamos las palabras conocidas, tan solo eternos silencios…como suspiros violentos, que se acoplaban en el aire, sintiendo…con ese miedo feliz de quien está viviendo un milagro.
Cante una canción a tu oído, una canción que hablaba de vos y de mí. Una canción que describió mi corazón como un viejo libro…y sentí tus miembros flaquear ante la armonía de los fonemas. Tan solo bastó mirarte para desnudar tu ser. Tu alma yació desnuda e indefensa en el suelo por un buen rato. Buscaba desesperada volver al cuerpo.
Solo brillabas, brillabas. Tu sonrisa se reflejaba en los espejos, tu ausencia se sentía más fuerte y sin embargo estabas ahí. Te busque, te seguí mas allá de las 4 paredes de la habitación. Corrí, con pies pequeños tras tu sombra que trepaba, que se hacía pequeña y desaparecía en la oscuridad.
De repente te incorporaste, y un millón de diablos se apoderaron de tu cuerpo. Te volviste salvaje. Tu brazo se mimetizo a mi cintura como una garra, y tus labios se prendieron a mi cuello como bebe a un pecho. Bebiste de mi boca sediento, como si hubieses vagado por el desierto durante años. Me volví frágil, me volví bruma en tus brazos, bruma que se escurría por tus dedos. Abriste mi pecho, y devoraste mi corazón. Mi mente paró…Todos los pensamientos se volvieron nada, y la nada se volvió todo… contigo mientras sentía las ondulaciones de tu piel.
Un millón de mariposas colmaron mi vientre, aleteos de pasión que se hacían sonido, que se hacían grito, que se hacían uno en el viento. Ya no existía mas nada allá afuera. Te conocía tanto y a la vez tan poco. La luna giraba, era la única testigo en la noche que huía furtiva y fugitiva, cargada en su cielo de deseos y fantasías. La luna alumbro tus ojos, y las galaxias se abrieron ante mí. Colores y formas que se disfrazaban en ese baile eterno. Tejimos una telaraña que atrapo nuestras almas en su red de plata. Por un momento desee despedazarte y que te acoplaras a mí, que nos fundamos en el fuego, pero mis miembros estaban inmóviles.
El alba nos encontró. La luz invadió el cuarto…tan solo yo, mis recuerdos y tu dulce y amarga huella a la vez. Ya te habías ido y ya sentía saudades de tus besos, de tus silencios, de tus ojos de tu eterna ausencia, de tu presencia.
Comprimí mi sexo, y exhale un suspiro, largo y ensordecedor y llore por ti, llore por mí, por nuestra última noche…por nuestro eterno adiós

martes, 23 de octubre de 2007

Ciudades magicas


A lo lejos, en el medio del cielo, un relámpago que encendió la ciudad de las luces muertas. Un rayo que parecía como una cicatriz en el corazón celeste. Luego del resplandor, se escucha un ruido como tambor de guerra. Las primeras gotas comienzan a caer, como lagrimas de Dios sobre nuestras cabezas.
Me siento en el escalón. Miro hacia los costados. Gente corriendo, otros caminaban despreocupados, y algunos otros; solo estaban ahí. El cielo se caía en pedazos, y yo disfrutaba de esa imagen apocalíptica que ante mis ojos se abría.
La lluvia se tornaba sensual, millones de gotas caían sobre mi piel como millones de dedos que me rosaban. Una tras una deslizándose sutilmente, recorriendo contornos, injertándose por mis poros. Totalmente extasiada, me subí al primer colectivo con rumbo a ninguna parte. Un boleto de ida por favor!!
Me senté en el último asiento para una mayor panorámica. Estire mis piernas como símbolo de dominio, y abrí la ventanilla dejando escapar la humedad ambiente. Bocinazos, gritos, insultos todo se acoplaba al nuevo escenario.
Me baje en la zona de los grandes gigantes, la ciudad de los edificios azules. Viejos monumentos a la tristeza, olvidados, añejos, mezcla de moho y recuerdos. Camine por sus calles angostas, olor a tango y bohemia se respiraba. De fondo una vieja melodía conocida acompañaba mi andar pausado. Rostros con historias, historias sin rostro. Todo danzaba ante mis sentidos. Carteles, imágenes, muchedumbre…Demasiada contaminación visual. Mis pupilas estaban dilatadas, descolocadas…necesitaba descansar…hacer introspección.
Cruce la calle, zigzagueando entre los autos que te pasan por encima como una vulgar mosca. Propicie algún insulto a un conductor desubicado y libidinoso, y me guarecí en un bar. Rustico pero acogedor, pequeño pero de corazón grande.
El olor a café molido trepaba por mi nariz de una forma más que excitante. La vieja radio pasaba un tema de mi banda favorita, extraño, ya que desentonaba con el aspecto arrabalero del lugar. Ordene un café con leche bien espumante con tres medialunas de manteca, recién horneaditas, crujientes y que desprendía un aroma a gloria impresionante.
Bebí mi café como una tromba. Siempre me reprocho el ser tan apurada con las cosas que me causan placer. Debería disfrutar más. Dejar que los sabores se fundan y se mezclen. Que los aromas se vuelvan uno solo y el mismo.
El lugar estaba casi vacío. Solo unas pocas almas sentadas a la espera de algo insospechado, un milagro. Todos personajes anónimos, con grandes pesos en sus espaldas y los vientres llenos de ese líquido amnésico, transformador de realidades.
Saque mi cuaderno de anotaciones, ese que siempre va conmigo…el de las tapas duras color verde, y comencé a garabatear esos rostros ajenos, perdidos. Los trazos se perdían con el papel, y con las luces que de apoco se fueron despidiendo.
Era tiempo de volver, o casualmente el mismo chofer que me trajo hasta estos parajes era el mismo que me devolvía a mi hogar dulce hogar. Afuera la lluvia había cesado, tan solo pendían las ultimas gotas de las copas de los arboles al agitarse con la briza de la madrugada.
Bajo, camino dos cuadras por las calles olvidadas, abro el portón e ingreso a mi hogar. Subo con sigilo las escaleras, como ladrón en la noche, y me meto en mi refugio, mi guarida de ermitaña, cofre de tantos divagues nocturnos.
Me zambullo en mi cama y dejo mis ojos cerrarse y volar de regreso otra vez a la ciudad de los edificios azules.

domingo, 21 de octubre de 2007

De amor y de odio




Amo: El caminar descalza por la casa, El helado de chocolate, las milanesas, el viento pegándome al rostro. La luna, El arcoíris luego de la lluvia, Escuchar mi canción favorita cuando estoy lejos, Los bosques. Las estrellas, los arboles de maple, los ositos cariñosos, la leche con chocolate, la luz, la oscuridad. Viajar en tren, mi soledad, la compañía, los osos de peluche, comer chocolate, reírme, llorar al ver una película, tomar fotografías, pintar, escribir… Caminar sin rumbo, divagar, soñar, vivir, la melancolía, los días de lluvia, el otoño, Londres, los paraguas, los espacios abiertos, pasar desapercibida, bailar, el cine, los colores oscuros, el bailey’s, estar con buenos amigos, los sábados, hacer música, cantar, olvidarme las cosas, las sorpresas, la espontaneidad, las conversaciones desquiciadas. Un buen libro, mis recuerdos, navidad, mi cumpleaños (por los regalos, jajá)
El mar, el olor a tierra mojada, el olor a pintura, viajar en tren, el sur, el suspenso, las caricias, las palabras sinceras, la verdad, la justicia, la libertad…sentir, besar, amar…hacer el amor. Dormir, pensar, ser y estar.


Odio: La sopa, las conversaciones monótonas, el calor, la música en español, la playa, viajar en bondi , llorar de tristeza, caminar con destino, pensar(siempre contradictoria), morir, los días soleados, el verano, los colores chillones, el chicle, los espacios cerrados, las personas aburridas o sabelotodo, olvidarme las cosas(otra contradicción mas), estar sola.
Los domingos, el futbol, el excremento de perro en las plazas, la monotonía, la muchedumbre, el olor a cigarrillo, los idiotas, las rubias tontas, Los espacios cerrados, la mentira, la traición, los celos, la maldad, odiar. Ahorrar, las escaleras, los políticos, los chorros, los violadores, la corrupción, los embotellamientos de tránsito, los programas basura de tv, las lapiceras que andan solo un día, los exámenes, ir al médico.
La violencia, los insultos, la falta de compromiso, la deslealtad, tener sexo, la mediocridad, la falta de ganas…el no tener esperanzas.

Radiografía de una persona amnésica…(de a poco comienzo a recordar)

viernes, 19 de octubre de 2007

Suicide girl!!!!


La chica suicida otra vez colgando del abismo. De porte fantasmal, luce como los ángeles antes de caer. Su cabello endiablado, de color azabache, contrasta con la blanca palidez de su piel, blanca y argenta. Sus ojos grandes y afilados, penetrantes, rabiosos mirando hacia la nada…exhaustos, reclaman libertad…esa libertad que nunca quisiste dar.
De su pecho cuelga un corazón, un corazón mutilado, amorfo e inerte. Su sangre helada, dejo de correr hace tiempo. Llenándose de bilis sus venas. Tu sexo grita, desea ser poseída. Tus demonios te aclaman…debes ser exorcizada, ¿pero quién tendrá semejante valor? Si todo lo que tocas lo conviertes en ceniza. Caminas por la cornisa, eres una malabarista. Y más lloras, mas desciendes., en tu carrera infinita al averno.
Su boca es como la manzana del pecado, de rojo carmesí. Pulposa como la fruta más fresca, objeto de deseo y perdición. Pero su lengua es acida y sus dientes filosos, nadie que se le acerca podrá resistir a su mordisco letal. Su perfume huele a jazmines y azufre, y su voz es como una melodía agridulce.
La chica suicida, esta pendiendo de un hilo retorcido, a punto de cortarse, a punto de caer. Tu mente divaga, no existe paragón en tanta belleza maldita. Cuantos han querido salvarte…y todos, uno tras otro cayeron en tu trampa mortal. Eres mórbida, eres salvaje, eres tristeza y deseo, pasión y odio.
Nunca conoció el amor, ni una caricia, ni un beso dado con sentimiento. Su guía es el sexo, pero el sexo mal pago, el que hace doler…y deja ese amargo sabor de boca. Solo carnal, solo lujuria. No sabe lo que es ser amada ni deseada para bien. Solo un hermoso trozo de carne que pasa de mano en mano como un presente.
Mata tu agonía, entierra tu tristeza…Corta el hilo que te amarra. Suelta la cadena que te une al mundo. Desaparece como la niebla, y sin dejar huella. Nadie recordara tu nombre, por que fuiste nada para nadie. Y divagaras en el limbo, desorientada y sin brújula, sin barco ni timón, hasta hacerte nada, y esfumarte entre las estrellas.

jueves, 18 de octubre de 2007

Bailarina en la oscuridad


A menudo me siento como ese narrrador omnisciente que se sienta a lo lejos a observar y a vivir la vida misma desde otro ángulo, como si nada me perteneciera.
Salí a caminar en lo profundo de la noche, acompañada de mi fiel amiga, la única que con esa sutileza puede captar las imágenes flotantes en mi mente…mi cámara. Me senté en el banco de una plaza desolada y por mi vista se cruzaron sensaciones inhóspitas, olores, imágenes, palabras, pero nada que fuera mío en verdad.
La gente pasaba, mas nadie volteaba a verme, me sentía invisible, como un adorno más de la decoración urbana. Y esa gente, en ese baile infinito de mascaras, estaba ahí y al mismo tiempo no estaba. Era una sensación extraña, esa sensación de no pertenecer; como cuando estás en un aeropuerto y no sabes en qué lugar del mundo te encuentras, perdiendo la noción espacio-tiempo, los “no lugares” que le llaman.
Pero el beneficio fortuito de ser y no ser, me ayudo a observar detenidamente el mundo que ante mis pies se desplegaba, como un gran abanico de posibilidades. Captar para mí esas imágenes, la gran farsa de la vida, como los seres animados luchan por ser y estar presentes. No personajes anónimos en la rueda de la fortuna. El gran ojo que todo lo ve.
Por un momento me sentí una especie de semi diosa. Podía interferir, cambiando su destino sin que ellos me vieran. La idea de la invincibilidad era algo más que seductor. Pero también existía el vacio.
Ángeles nocturnos, vagabundos, amantes apasionados buscando el amor o simplemente el contacto físico…tantos actores en el escenario, y ninguna obra que interpretar. Todos captados por mi gran ojo observador.
Doy un par de vueltas, de mis orejas colgaba mi mp3. Bendito aparato que sin él no soy nada. No solo es un simple artefacto tecnológico, es el pasaporte a un mundo infinito de relatos. Cada canción contenida, es un sentimiento diferente, en la cual soy por primera y única vez la gran protagonista de la historia. Me pierdo en la ciudad de los edificios, toneladas de hormigón y acero templado me sepultan. Me siento pequeña, como trepando en el vacío. Una equilibrista más. Bailarina en la oscuridad.
Al fin, en una de las esquinas; un rostro conocido. Nos saludamos. Ese abrazo fue como acoplar todo su cuerpo sobre el mío, mis huesos tronaron. El efecto de invincibilidad había desaparecido. Me sentía poco especial otra vez, una actriz más en este rol que la vida me dio a interpretar. Marchamos juntos a tomar un café, que finalmente termino en una bebida rubia y espumante, dulce ya amarga a la vez.
Así pasamos las horas entre conversaciones banales, y algún que otro beso sin alma para matar el tiempo cuando las palabras faltan. El sol salió, era tiempo de volver. Nos despedimos y de apoco nos fuimos alejando, remontados entre el sueño, el smog y el alcohol. Dos errantes más en el amanecer de una ciudad.

miércoles, 17 de octubre de 2007

Reloj


Eran las cinco am de un día lluvioso y gris, ya no recuerdo el día, mas no así los sucesos. Esos quedaran pregnantes en mi memoria como un grabado a fuego.
El reloj de la vieja estación seguía girando, más el mío se había detenido en el espacio circundante. Los ojos me pesaban, como dos enormes bolsas de cemento que caían por mis parpados…aun guardaba vestigios de la mala noche de sueño anterior. Necesitaba hacer tiempo. Mi cabeza estaba dubitativa, aun divagaba entre el sueño y la realidad. Tome un café, negro y espeso como la niebla atmosférica que nos rodeaba., para ver si podía despejar las lagañas que me atormentaban.
Los minutos corrían carreras estrepitosas, mas yo seguía viendo todo en el mismo lugar. Los sonidos se intensificaban, sentía las pisadas retumbar en mis tímpanos, como pisadas de elefantes. Me estaba comenzando a desesperar. Comencé a caminar de un lado a otro desvariando. Hablando para mis adentros frases incoherentes. Un millón de pensamientos se venían a mi mente y no sabía cómo lidiar con todos ellos.
Me pare junto a un poste telefónico, crucé los brazos por detrás de la espalda y comencé a jugar con mis dedos de una forma bastante nerviosa, como entretejiendo miedos y esperanzas.
Por un segundo sentí como si la gente ya se estaba empezando a inquietar por mi presencia, miradas clavadas en mi nuca como miles de agujas de vidrio, perforantes…penetrantes. La angustia me consumía, sentía ese malestar correr por mis venas como un veneno…me daba asco, rabia. Sentía la ira brotar por mis ojos como cataratas de azufre.
El reloj marco las ocho. Exhale profundamente, como dejando escapar algo más que una bocanada de aire. Perfile hacia aquel banco, signo de la espera…e intentando no llorar, mis lagrimas se volvieron sal, y mi corazón de piedra caliza.
Y escribiendo una nota me aleje de tu recuerdo completamente:”YA ENTENDI TODO…VOLVERE DE DONDE NUNCA TENDRIA QUE HABER SALIDO. EN UNA MANO MI VALIJA, Y EN LA OTRA…UN PUÑADO DE SUEÑOS ROTOS”
Y el último tren con destino a ninguna parte salió del andén…y la vida giraba, giraba y giraba.

lunes, 15 de octubre de 2007

Corazon de marfil


Una suave briza primaveral envuelve el aire. Hipnotizados por el suave perfume de las fresias que descansan en el viejo florero de color rubí, trepamos al cielo en una carrera infinita.
Siento el corazón débil, como débil es mi voluntad. Un corazón como de marfil, factible de romperse en pedazos cada vez que con tus dedos vas delimitando el contorno. La atmosfera me consume, tan solo resta esperar. En el fondo, escucho voces como latigazos en la sien. No me dejan dormir, es que tan solo no puedo dejar de pensar en ti, y en esas noches fugitivas que vivimos.
El aire es enviciante, siento el pecho comprimido. Las palabras no resuenan. Siento la garganta áspera, como una lija vieja…deseo gritar mas la voz no sale, no vibra. Me tiemblan las rodillas, siento miedo.
Mis ojos se derriten transformando lo real y tangible. Todo está dando vueltas. Las formas se perfilan como a través de un caleidoscopio, donde luces y colores se transfiguran, para formar una nueva realidad. Los olores que penetran por mi nariz, van anestesiando mis sentidos. Deseo saltar, y encontrarte en el vacio eterno.
Las horas van pasando, y el tiempo nos corre con tiranía. Tu pecho se acopla al mío, parecemos seres andróginos batallando por escapar y encontrarse a la vez. Una gota de sudor frio rueda por la espalda, contraigo los pies, mientras en el rostro se dibuja alguna mueca. Mis cabellos finos y enmarañados te van atando como en una gran telaraña. Esta noche serás mi víctima. Te devorare, te desarmare en átomos, y absorberé todo de ti…para que te fundas en mis poros, para que seas parte de mi sangre, mi sudor y mi hedor.
Volamos, el espacio es nuestro. Tocamos lo divino con la punta de los dedos, nos consumimos. Sentí la explosión y la implosión de todo mi ser, estallando en millones de macropartículas que se fundieron con el aroma de las flores. Al fin sonó mi voz, en un grito de vida y muerte a la vez, de mi garganta manaban sonidos estremecedores, que entibiaron tu corazón palpitante.
Al final del viaje, repose en tu hombro, y caí rendida ante tanta magia. Al fin me rendí, baje las armas y sucumbí ante la inmensidad de tus ojos vidriosos, mientras tus manos me hacían de cobijo. Luego…nos miramos, nos besamos…en la despedida de la noche blanca, y la triste realidad de volver a lo real.

La vie est expresionism!!!




Hace un par de días atrás…mmm, ya no recuerdo bien exactamente... (perdón pero demasiada información se ha incorporado últimamente)…mientras estaba preparando mi clase para Historia del Arte, descubrí con extraña apariencia aspectos muy similares de mi insignificante existencia con dos personajes patrones del movimiento expresionista. Munch y Ensor.
Ambos dos, relataban con total sensibilidad las miserias del mundo y sus tragedias, pero desde diferentes ángulos. Mientras que Munch, pintor escandinavo…autor de la supermega-archi reconocida obra “El Grito”, retrataba sus decepciones, angustias, miedos y tristezas desde la absoluta depresión; Ensor, precursor flamenco, lo hacía desde la burla, la sátira. Para él la vida era un gran juego, una farsa bien orquestada.
Ahora bien…al mirar sus obras y sus conceptos de vida. Me refleje bastante en su pensamiento. La melancolía, es el estado de ánimo que mejor nos sienta. Esa búsqueda eterna. Amantes de lo solitario, nos gusta guarecernos como ermitaños ante el mundo. Somos eternos escapistas que confrontamos la realidad quizás a veces reflejando más dolor todavía, queriendo despertar conciencia en quienes nos observan.
Si bien, carezco del espíritu autodestructivo y absolutamente fantasmal de ambos. Siento belleza al ver sus obras. A pesar del dolor, y toda la carga simbólica que ellas conllevan. Es absolutamente interesante, el pensar como el hombre suele maravillarse ante lo horrendo. Encontramos belleza en el dolor, porque él en sí mismo es expresión pura. Nos vasta tan solo con encender la tv. El 99% de los programas televisivos, son reflejo de todas las miserias humanas, del dolor…y en ciertos momentos, aunque en un principio escandalicen, terminan seduciéndonos, nos atrae…Esa pequeña cuota de morbosidad humana. No puedo mirar, pero sin embargo no puedo alejarme de él!
La vida, es completamente expresionista. Desde el dolor a la más pura de las alegrías. El dinamismo, la energía del vivir se refleja en esas obras. La expresión es sentir…por lo tanto el sentir es vivir!!!

sábado, 13 de octubre de 2007

Luna Rosa


Una suave atmosfera rosada tiñe la bóveda celestial. Allí se encuentra mi luna. Altiva y serena, envuelta en esa gran bruma que la contagia de color. Creo que hable demasiado rápido. Y todos los pensamientos que le propicio quedaron suspendidos en el aire. ¿Me amara como yo la amo?... ¿pensara en mi?
Cada noche abordamos siempre el mismo tren a la melancolía, su ruta ya no nos lleva a ninguna parte. Te miro, allá arriba...suspendida en el espacio infinito. Te oigo llorar entre millones de estrellas fugaces…y yo aquí, imposibilitada.
Deseo tenerte, que te fundas en mí. No quiero que nadie más te contemple…deseo robarte y colgarte en mi pecho, que seamos uno por toda la eternidad. Mi luna rosa…eres frágil como porcelana, etérea, sublime…te observo y te anhelo; mas me siento inferior, por que nunca estaré a tu alcance.
¿Por qué te amo tanto?... ¿será que en ti reflejas el nombre de mi amor?...necesito alcanzarte. Navegar hasta ti. Los ojos me duelen como dagas infinitas clavadas en mis retinas. Mi corazón se desploma y se rinde ante tu majestad. Te deseo…como jamás he deseado nada en este universo…mas también te odio de tanto adorarte.
Creo que ya lo he visto, creo que ya lo he escrito…la luna rosa esta en el camino. Y allí seguirás por siempre…hasta el día que remonte y vaya a tu encuentro. Nadie está a tu altura, y mucho menos…yo.

jueves, 11 de octubre de 2007

Mariposa negra


Corria, se escaba. Temerosa y austada. Por sus ojos algunas veces se filtraban lagrimas, finas y filosas, como cristales que cortaban su mirada.
Su sonrisa, ya no era la misma. Hacia tiempo ya que de su voz no se escuchaba nada, mas que amarguras.
Su timbre de gorrion, hacia mucho ya que se habia ensombrecido por los humos,
dejando una estela espesa, tan pesada como las cadenas que amarraban sus pies pequeños.
Desanjelada y sin Dios...buscaba en lo profundo unas alas que la ayudasen a volar, mas alla de su propia miseria.
Ya no recuerda su nombre, no recuerda su voz, si alguna vez fue feliz...es una vagabunda de sus propios deseos, carente de tacto, ajena a todo y todos.
Pequeña suicida, eres como una mariposa, que pronto morira. Hermosa, sombria y grotesca a la vez.
Eres sadica...te encanta flagelar tu corazon. Te llenas las manos de sangre, y como un autista, esquivas la mirada. En tus ojos ya hay nada. Solo el vacio existencial. Quizas, en esa cabeza perversa, aun pueda encontrar algun vestigio de lo que alguna vez fuiste...y salvarte de alguna forma de arder. Pero siento que es tarde, y tu mariposa negra...ya elegiste tu destino. Te congelaras hasta que el frio haga de ti una simple estatua de cristal, que yacera por siempre.